Que esté en un blog o en la página no tiene que ver.
Antes que nada, lo más obvio pero que podría ser el problema: el volumen del reproductor. Fíjate en el altavoz al lado del botón play, y fíjate de que no esté muy bajo.
También deberías comprobar el volumen al que tienes configurado el navegador y los altavoces.