En los casos donde los vídeos no sobrepasan los límites, pero aún encierran contenido sexual, podemos aplicar una restricción de edad para que solo los espectadores mayores de cierta edad puedan ver el contenido.
Los vídeos con desnudos o conductas sexuales dramatizadas pueden restringirse en función de la edad cuando el contexto sea adecuado por motivos educativos, documentales, científicos o artísticos. Los vídeos que presenten a personas con poca ropa o ropa sugerente también pueden restringirse en función de la edad si pretenden ser sexualmente provocativos pero no muestran contenidos explícitos.