Deberás tener la autorización escrita del dueño de los derechos de la música, o haberla creado tú mismo(a) por completo. Si se trata de música de grandes compañías discográficas, seguramente no te darán autorización si no pagas una enorme cantidad de dinero por una licencia.
Si planeas hacer un uso comercial de ese contenido, hay algunos sitios que la ofrecen con licencias creative commons para uso comercial, pero quizás te veas más limitado a la hora de buscar.