Estimado, conviene que usar la versión normal, conocida como versión estable.
Google pone a disposición de los interesados otras dos versiones más avanzadas: la beta y la dev.
Con ellas podés probar lo que se viene, lo nuevo, pero se cuelgan a cada rato.
Cuando instalás una beta o una dev, estás ayudando a depurar el código de Google Chrome. Cuando queda completamente depurado, se convierte en versión estable.